El 3 de octubre de 1997, el Concejo Municipal de Avellaneda sancionó la Ordenanza N° 952 que prevé la preservación del patrimonio turístico ubicado en el Camping Municipal Los Tatané.
En dicho instrumento legal se expresa que «la caída de especies de tatanés como consecuencia de la erosión que provoca el arroyo El Rey toma indispensable la realización de obras que tiendan a solucionar dicho inconveniente» y que «luego de los estudios técnicos practicados, el proyecto prevé como única alternativa válida la modificación de la actual traza del arroyo, realizando un corte, en una zona previamente estudiada para que alivie el cauce en épocas de creciente, evitando el avance de la erosión en el sector del camping, sin afectar al balneario e incorporando hectáreas que deberán ser parquizadas”.
En virtud de ello, el Cuerpo Legislativo autorizó la compra de 4,5 hectáreas ubicadas hacia el Oeste del camping, en lo que era el Distrito Reconquista, para poder desviar el cauce del arroyo y evitar la erosión que producía el mismo en el codo que formaba junto a la arboleda.
En su artículo primero la ordenanza dice: «Apruébase el proyecto para la preservación del patrimonio turístico del Camping Municipal «Los Tatané», ubicado en el Distrito Avellaneda…»
El 15 de agosto de 2008, el Concejo Municipal de Avellaneda trasladó al Departamento Ejecutivo Municipal un tema que estaba siendo estudiado para el res- guardo de dos especies arbóreas que son patrimonio histórico y rareza vegetal, para que, a través de la asesoría legal, se planificaran y adoptaran las medidas pertinentes.
«Se trata – dice la nota – de un algarrobo blanco centenario, ubicado en el campo de propiedad de los Sres. Miguel y Oreste Zupel, y la denominada «Palmera de los cuatro brazos» (único ejemplar conocido en el mundo), en el campo del Sr. Rubén Vénica. Es idea de que, además de su resguardo, se prevea un acceso y un espacio físico público en las adyacencias de los árboles mencionados para permitir que los mismos sean observados y/o fotografiados por turistas o personas de nuestra región que se sientan atraídos por estos verdaderos prodigios de la naturaleza».
