En una reunión de vecinos realizada el 4 de julio de 1915, se resolvió “levantar en el lote 67 una capilla de material en lugar de la primera de paja y barro, en honor a la Virgen de Lourdes”.
Ya a punto terminarse la obra, el 20 de agosto de 1915, el RP Francisco Comini envió una nota a Mons. Juan Agustín Boneo pidiendo autorización para bendecirla e informándole que, en los cimientos de la gruta, se colocaría millares de firmas de los vecinos que contribuyeron para que la obra se hiciera realidad, pidiendo para ellos y para los asistieren a la Misa de Inauguración, una bendición especial, concediéndoles la Santa Indulgencia.
En su respuesta, Mons. Boneo expresó: “… concedemos 50 días de indulgencia a los que asistan a la ceremonia de inauguración, asó como por cada acto de la Santa Misión, e impartimos nuestra Bendición Pastoral al Sr. Cura y a todos los que contribuyeron y contribuyen a la erección de la Capilla de Ntra. Sra. De Lourdes y al éxito de la Misión”.
El acto de inauguración se llevó a cabo el 20 de setiembre de 1915.
Treinta años después, la capilla fue remodelada, dejando su estructura como se la observa actualmente. Esas nuevas obras fueron bendecidas el 28 de enero de 1945 por el RP Celso M. Milanesio.
Con respecto a esta Capilla, el Concejo Municipal de Avellaneda, sancionó la Ordenanza nº 1310, el 23 de agosto de 2007, disponiendo: “Artículo 1º: Declarase Edificio Histórico de la Ciudad a la Capilla Nuestra Señora de Lourdes situada en el lugar donde antiguamente existiera el templo construido por los inmigrantes que dieron origen a esta comunidad”.
POR VICTOR BRAIDOT- EXTRACTO DEL LIBRO “AVELLANEDA EN EL TIEMPO”. SEGUNDA EDICIÓN, TOMO II.