Luego de la denuncia realizada por una vecina a través de Vía Libre, que generó una fuerte repercusión en la ciudad en la tarde-noche del miércoles, este medio dialogó con el director del Hospital Central de Reconquista, Dr. Juan Nardín.
La mujer denunció que debió esperar más de cuatro horas para ser atendida junto a su hija en la guardia, y compartió un video en el que se ve a la niña durmiendo en las sillas de la sala de espera tras haber vomitado.
Consultado por este medio, Nardín reconoció que se registró una alta demanda de atenciones, particularmente en el área de guardia. “Es real que hubo bastantes consultas. Con este clima estamos teniendo más que en semanas previas“, afirmó. También mencionó que durante la tarde ingresó un paciente con un paro cardíaco, lo que movilizó al personal.
El director aseguró que la atención comenzó a normalizarse tras el cambio de guardia nocturna, y destacó que, en comparación con el inicio del año, hay una mejoría en la atención de urgencias. No obstante, reconoció que la guardia es el “embudo del hospital” y uno de los sectores con más dificultades.
En cuanto al personal, admitió que se han detectado situaciones en las que profesionales en turno se encontraban usando el celular para cuestiones personales. Eso derivó en advertencias, aunque no se aplicaron sanciones ni sumarios.
Sobre cómo abordar estas problemáticas, Nardín señaló que se están planificando nuevas medidas, entre ellas reuniones con el equipo, capacitaciones y posibles rotaciones de personal. “Ayer hubo una gran consulta de gente y se notó esa dificultad. Se va a trabajar sobre eso para agilizar la atención y disminuir los tiempos de demora, tanto en guardia como en triage“, afirmó.
A pesar de las demoras, el director subrayó que ningún paciente queda sin ser atendido. En relación con la denuncia de una madre que se retiró tras la larga espera, respondió que “en algún momento podrían haberla atendido“.
Otras dificultades
Ante reclamos de oyentes sobre otras especialidades, Nardín confirmó que hay problemas con la reumatólogía clínica en toda la región, y en cuanto a oftalmología, explicó que solo quedan dos profesionales, cuando años atrás eran cinco, lo que genera algunas demoras.
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