Durante la audiencia realizada esta semana, se trató el informe elaborado por la Junta de Salud Mental respecto a la situación de Mauro de Dios Pereyra, quien fue detenido hace pocos días por varios hechos de robo.
Se resolvió remitir el caso a la justicia civil. El objetivo es que el joven permanezca alojado en una institución especializada, y que sea la justicia competente la que determine si corresponde mantener esa internación y bajo qué condiciones.
Una de las psicólogas intervinientes advirtió que Pereyra no se encuentra en condiciones de afrontar una audiencia penal, motivo por el cual se decidió suspender la causa hasta tanto se pueda establecer si es posible que recupere su capacidad de comprensión del proceso penal. Cabe señalar que el imputado cuenta con un certificado que acredita un retraso mental leve.
El Dr. Sebastián Marichal fue el fiscal.
Las palabras de la Dra. Paola Milazzo:
Ella declaró que la Dra Senn sugirió una evaluación psiquiátrica, por lo cual una junta de médicos del Hospital Central evaluará si es necesaria una internación involuntaria. El poder judicial solo puede hacer un control de legalidad y controlar periodicamente el tratamiento aplicado sobre el paciente.
