Este lunes hablamos en nuestro programa radial con el remisero Sixto Eichenberger, quien el pasado sábado 1 de febrero sufrió un intento de robo a punto de pistola en su vehículo. Gracias a su rápida reacción, logró evitar el robo, pero la situación fue un nuevo ejemplo de la inseguridad a la que se ven expuestos los trabajadores del rubro.
Eichenberger, con años de experiencia como remisero, relató que atendió un pedido de la central para buscar a un pasajero en la intersección de las calles 44 y 49, en barrio Vicentina de Reconquista.
Siguiendo su protocolo de seguridad que utiliza cuando tiene un pedido en horas de la madrugada, decidió que el cliente se sentara en el asiento delantero, una práctica que algunos remiseros implementan para tener mayor control en caso de incidentes.
El pasajero, que se identificó con el apellido “Gómez” (probablemente falso), llevaba consigo una bolsa blanca. Inicialmente, solicitó ser llevado a la zona de Martelossi con el argumento de buscar a otra persona. Sin embargo, al no encontrar a nadie, pidió ir a una casa quinta, y luego a otro lugar que se encontraba también en Martelossi.
Al llegar al destino final – el viaje valía $10.000 -, el pasajero sacó un arma de fuego y exigió la billetera y el celular del remisero. “No te voy a dar nada”, fue la respuesta de Eichembergger, quien en un acto de reflejo intentó desarmarlo. En el forcejeo, el delincuente abrió la puerta del auto, lo amenazó nuevamente y terminó huyendo, dejando en la bolsa un cuchillo y un trapo de piso.
Tras el hecho, el remisero alertó a la central, que rápidamente contactó al 911. Un patrullero que se encontraba en la zona acudió al lugar, pero el asaltante ya había escapado.
EL MOMENTO DE SER APUNTADO POR UNA PERSONA CON UN ARMA DE FUEGO:
“En ese momento uno se carga de adrenalina y no sabe muy bien lo que está haciendo”, explicó Eichenberger, señalando que, aunque su reacción fue instintiva, lo ideal en estos casos es priorizar la seguridad personal.
El testimonio de Eichenberger deja al descubierto la vulnerabilidad en la que trabajan los remiseros, especialmente en horarios nocturnos y en barrios de mayor riesgo. “Muchos compañeros ya no quieren trabajar de noche ni entrar a ciertos barrios porque es peligroso“, comentó.
Escuchá acá la entrevista completa:




