En la mañana del miércoles, José Alejandro Bonacci, dirigente político y militante, dialogó con Vía Libre sobre su trayectoria, su visión de la política provincial y su apoyo a Javier Milei.
“Venimos militando desde 1982, siempre desde una posición nacionalista, peronista y criticando una democracia que consideramos incompleta. El concepto de casta lo manejamos desde hace años, porque entendíamos que la democracia estaba en manos de un selecto grupo que ostentaba los poderes partidarios y el poder efectivo del país”, expresó.
Bonacci aseguró que siempre trabajó contra esa estructura y que, en el camino, encontró líderes que interpretaban la realidad desde la antipolítica, como Amalia Granata en Santa Fe y Javier Milei en Buenos Aires. “Ambos fueron fenómenos similares: venían de fuera de la política, tenían una posición crítica, participaron sin recursos y con partidos pequeños. Amalia logró seis legisladores y Milei dio el batacazo en Capital con dos diputados nacionales y cinco legisladores. En ambos casos, los acompañamos”, recordó.
Sin embargo, marcó una diferencia entre los dos procesos. “En el caso de Milei, había un proyecto político-cultural-social-económico que se potenció y se plasmó en la realidad. En el caso de Amalia, ese proyecto nunca existió.” En este sentido, criticó a Granata por su falta de vocación para el trabajo en equipo.
Sobre la actualidad de Santa Fe, advirtió: “Estamos a punto de convertirnos en Formosa”. Según Bonacci, existe un proyecto político encabezado por Maximiliano Pullaro que busca monopolizar la política de las próximas décadas. “Tienen toda la voluntad y la capacidad de trabajo para hacerlo”, afirmó, y expresó su temor de que en la provincia se establezca una tiranía, amparada en poderes extraordinarios y en la falta de oposición por parte de la ciudadanía.
Finalmente, ratificó su apoyo a Javier Milei. “Banco a Milei porque Argentina tiene una crisis de vocaciones. Los policías no tienen vocación de policías, los maestros de maestros y los políticos de políticos. Nos falta pasión, y si hay algo que tiene Milei, aunque a veces pueda equivocarse, es pasión para cambiar la realidad y una honestidad intelectual de que al tipo no lo van a comprar por dos monedas”.
Respecto a su relación con el presidente, aseguró tener contacto “cuando es necesario” y destacó su integridad: “Cuando Milei sabe, es un tipo honesto. No le va a temblar la pera por un millón”.
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