La Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (ANMAT) emitió una advertencia preventiva tras detectarse organismos que, a simple vista, parecían gusanos en un lote de tomate triturado de la marca Marolio. Los estudios preliminares indican que se trataría de Microstomum sp.
DETALLES DEL PRODUCTO AFECTADO:
Producto: Tomate triturado sin gluten, marca Marolio
Presentación: Envase de 500 g (Tetra Pak)
Lote: L25114
Fecha de vencimiento: abril de 2027
RNPA: 13‑061695
RNE: 13010369; elaborado por Marolio S.A. en CABA, con origen en Mendoza
El caso fue detectado en el municipio de Rojas (Buenos Aires), a través de denuncias realizadas por familias que recibieron el producto mediante el programa de distribución escolar.
Acción de autoridades sanitarias:
El Instituto Nacional de Alimentos (INAL) activó la coordinación con las autoridades sanitarias de Mendoza, donde se elabora el producto, y con la Dirección de Industrias y Productos Alimenticios (DIPA) de Buenos Aires, con el objetivo de investigar y controlar el lote afectado.
Recomendaciones oficiales:
Para la población: Si posee el lote L25114, absténgase de consumirlo y comuníquese con la autoridad sanitaria de su localidad.
Para comerciantes y distribuidores: Suspenda la venta del producto y contacte a su proveedor para facilitar la trazabilidad.
¿Qué se sabe sobre Microstomum sp.?
Especialistas aclararon que Microstomum sp. es un gusano plano de tamaño reducido que no representa un riesgo patógeno para los humanos, pero su presencia evidencia una probable falla en las prácticas sanitarias del proceso productivo.
El ingeniero Matías Hallu, del Centro Tecnológico de Alimentos de la UTN.BA, sostuvo que “el riesgo directo es bajo”, aunque esta situación representa una alerta sanitaria.
La ingeniera en alimentos Erica Pitaro Hoffman señaló que, si bien este organismo no causa enfermedades y el puré de tomate tiene un pH ácido que dificulta el crecimiento de bacterias patógenas, su detección implica “una falla en las buenas prácticas” y, por lo tanto, no se recomienda su consumo.
El procedimiento estándar incluye la retención del lote, análisis para confirmar la especie específica y estudios microbiológicos para descartar patógenos peligrosos.