“Todo este año estamos cumpliendo sesenta y ocho años de la empresa, aprovechamos todos los festejos y los motivos para estar bien y contentos, no es poco sesenta y ocho años”, comenzó diciendo Susana Sartor en el comienzo de la entrevista con José Odasso.
“Pasa la vida, pasan cosas lindas y feas, pero uno las va viviendo, las va tanteando, las va arreglando, hay que permanecer siempre”, aseguró la empresaria. Más adelante Susana Sartor evaluó que la empresa está en la lucha, “estamos tratando de sacar el producto que está en vigencia, siempre hay productos nuevos, siempre esta lo que pide la gente”, explicó.
Añadió que siempre están en búsqueda del sabor que les exige la gente, “siempre pensando en las innovaciones, siempre tratando de cuidar al máximo los costos para que el número al final del ejercicio nos cierre, porque de eso se trata, no solamente hacerlo por el hoy, sino porque esto debe continuar”, remarcó la empresaria.
Sostuvo que en la zona donde está instalada la empresa cuesta mucho, “estamos lejos de los grandes centros, de los grandes consumos, cuesta movilizarnos a través de las rutas que no están en bien de paso”, confió Susana Sartor.
Fíjate cual es la ironía que en nuestro producto se nota mucho lo de las rutas, porque el jugo y la gaseosa si pisas un pozo y ya se puede pinchar la botella.
Analizó que es un rubro que amerita tener mucho cuidado, “ya a esto lo hacemos con mucha pasión, nos gusta y no es que nos negamos y renegamos de esto, seguimos adelante de la manera que se pueda, año tras años vamos logrando distintas metas”, manifestó Sartor.
La empresaria dijo que la tormenta se renueva, “para eso estamos preparados, las crisis se van renovando son distintos los motivos”, explicó Susana Sartor, que también aclaró que las crisis se dan tanto dentro como afuera de la empresa, “nosotros estamos bien pero no sabemos que nos espera en el futuro”, lamentó.
“Ahora se le agrega la pandemia que nos sabemos por donde sigue esto, a nosotros cada vez que aparecen estas cosas nos da un coletazo”, sostuvo Sartor. Más adelante la empresaria dijo que pasaron cosas que tres años atrás no sabían de la existencia de este tipo de cosas. “Sabemos laburar es lo único que sabemos hacer”, remarcó Sartor, que enseguida dijo que están cada uno en su puesto, “con el tema del covid faltó mucha gente, hubo momento en que tuvimos diez personas contagiadas, pero no aflojamos nunca, todos nos cubrimos entre todos”, mencionó.
“Tuvimos una baja de un personal que fue muy importante en la empresa eso fue muy sentido, no lo olvidamos y esas cosas nos marcan a fuego y nos revalorizan la parte humana que tratamos de no olvidarla, el valor humano que se pierde se lo siente mucho”, explicó emocionada la empresaria.
Para el próximo aniversario aseguró que le gustaría tener algunos productos nuevos que por la pandemia no lo pudieron tener en el mercado, “tratamos que el producto nuevo nos de nuevas esperanzas, que nos dé nueva luz”, comentó Susana Sartor.
“Me veo generando productos nuevos y que estos continúen”, finalizó Susana Sartor integrante de la empresa Bartolomé Sartor e hijos S.R.L.
Un poco de historia
Bartolomé Sartor e Hijos, es una empresa nacida en 1954 en Avellaneda, Provincia de Santa Fe, cuya actividad inicial fue la producción de soda en sifones.
Actualmente la empresa posee una moderna planta industrial, donde elabora la totalidad de sus productos.
La oferta de la empresa incluye jugos concentrados líquidos y en polvo, gaseosas, aguas saborizadas, soda en botellas, soda en sifón descartable, edulcorante líquido y gelatinas.
Los productos de la firma abastecen una basta región del territorio argentino, comprendiendo las regiones centrales, el Noa y el Nea.
En las citadas regiones, la empresa posee varios centros de distribución, los que a su vez articulan la actividad con una red de representantes autorizados.
Información suministrada por la empresa en su web.
Nuestra HISTORIA en DECADAS
1954-1964
En Avellaneda Santa Fe, el 30 de abril de 1954 Bartolomé Sartor y sus hijos Alfredo, Roberto, Adolfo y Conrado, apuestan a una pequeña fábrica de aguas gaseosas (naranjina) y soda en sifones. La producción artesanal alcanza a los 4 cajones por hora. La venta se realiza en carretilla.
1964-1974
Se obtiene la concesión para envasar y comercializar los productos TERMA. De la soda en sifón se pasa a producir AGUA DE MESA SARTOR en botellas 3/4.
1974-1984
Surge la marca propia para gaseosas en envase de vidrio de 1 litro: PENT “nació en la tierra donde la sed es grande”. Las modificaciones en el consumo traen como consecuencia el surgimiento de un nuevo producto: el JUGO PENT, preparado para diluír. En poco tiempo la capacidad productiva alcanza a 10.000 botellas hora. Estos años están marcados por la ampliación constante de la cartera de clientes.
1984-1994
El lanzamiento de PENT 10 es un éxito debido a la suma de sus características: rinde 10 veces el contenido del envase, por eso es muy económico y además se prolonga el período de aptitud. Esta bebida constituye un verdadero “caballito de batalla” para la apertura y el ingreso a nuevas zonas de comercialización, se llega a las provincias del norte del país.
1994-2004
En gaseosas llega PENTY en envase de P.E.T. con la que se inaugura una instalación moderna de envasado. En el inicio del Mercosur, PENT 10 está presente en las góndolas de los cuatro países que lo integran.
2004-2013
A pedido del público, nace un nuevo sabor para completar la línea clásica de gaseosas, Pomelo Blanco. Se decide incursionar con una línea de Aguas Saborizadas: PENT FREE y comenzar con el rubro alimentos; nace así DULCIN EDULCORANTE Y PENT GELATINA.