El directorio de la empresa concursada comunicó la imposibilidad de obtener contratos de fazón para cumplir regularmente con los compromisos asumidos. El pasivo pos concursal ya supera los 10.000 millones de pesos y no hay caja para afrontar los sueldos de marzo.
Se venía trabajando con maíz para la planta de bioetanol de Avellaneda y con girasol en Ricardone. Son 198 trabadores aquí y 300 en el sur provincial, sobre 1100 operadores que posee la empresa.
La comunicación empresaria afirma sobre la decisión de proceder al cierre seguro de las plantas en operación, “como forma de proteger los activos para arrancar cuando sea factible”.
El documento de Vicentin destaca que continúan en dialogo permanente con todas las partes interesadas, en procura de retomar la actividad tan pronto sea posible.
Lo cierto es que en este contexto de incertidumbre ante la demora injustificada de la justicia provincial, les resulta muy difícil conseguir empresas dispuestas a trabajar a fazón. Puntualizan que el acuerdo de acreedores, luego de tres años, sigue sin ser convalidado por la justicia santafesina.
Algunas voces de la empresa se animan a manifestar que estas horas marcan un punto de quiebre y dolor y que remontar esta situación no será nada fácil. El futuro es muy incierto, vienen tiempos duros, aseguraron a este medio.
La justicia tiene la última palabra:
La reunión semanal de la Corte Suprema puede resolver si acepta o no la solicitud para que la homologación del concurso pase al máximo órgano de justicia de la nación. Si ello ocurriese, podría ser un paso en el sentido esperado.
Se aguarda también que el juez Fabian Lorenzini convoque al actual directorio, a los socios estratégicos e interventores para analizar el cuadro complejo de la realidad actual y tomar medidas al respecto. Se especula que podría llegar a ordenar la intervención del directorio de la empresa.
El comunicado completo:
Comunicado Vicentin (06-04-25) by Vialibrereconquista