La presidente de la Cámara de Diputados de Santa Fe, Clara García, realizó un balance del año legislativo y subrayó la importancia histórica de la Legislatura como sede de la reforma de la Constitución provincial, un proceso largamente esperado y alcanzado con el consenso de gobiernos de distintos signos políticos.
“Tuvimos un año muy vibrante, no solo por la tarea legislativa normal, sino por ser la casa anfitriona de la reforma constitucional”, expresó García, y remarcó que se trata de un hecho institucional que atraviesa a toda la provincia. “No todo pasa en la ciudad capital o en las grandes ciudades; pasa en el norte, en el sur, en toda Santa Fe”, afirmó.
La titular de la Cámara explicó que, más allá de la sanción de la reforma, ahora comienza una etapa clave de implementación. “Estos nuevos mandatos constitucionales hay que darles vida”, sostuvo, y señaló que los cambios se irán notando de manera progresiva. “La gente los va a ir viendo a medida que ocurran”, indicó.
Como ejemplo, mencionó la modificación en los mandatos de las autoridades locales: “Antes, en las localidades pequeñas se elegía cada dos años, casi sin posibilidad de pensar proyectos a largo plazo; ahora será cada cuatro años, lo que da un horizonte distinto para animarse a transformar”.
También hizo referencia a cambios dentro de la propia Legislatura: “Como resabio de viejas épocas empezábamos las sesiones ordinarias en mayo, algo que hoy no se condice con la dinámica de estos tiempos”, señaló.
En relación con el perfil productivo de la provincia, García destacó que Santa Fe mantiene una identidad propia. “Santa Fe, apoyando a sus pymes, a su industria y a su logística, tiene una marca que a veces va distinta a la de la Nación, por ejemplo frente a la apertura indiscriminada de importaciones”, manifestó.
Asimismo, valoró el trabajo realizado en los últimos dos años en la Cámara baja: “Demostramos que podemos trabajar en equipo, lograr muy buenos resultados y hacerlo sin resignar nuestras identidades partidarias”, afirmó.
Finalmente, de cara a 2026, expresó un deseo personal y político: “Yo deseo que todos tengan trabajo”. En ese sentido, agregó: “Sufro mucho cuando sé que cierra una fábrica o un negocio, cuando alguien pierde la posibilidad de llevar con dignidad lo que su familia necesita”. Y concluyó: “Tener trabajo da un aire diferente; es fundamental para la vida de las personas y de la provincia”.
