Anécdotas del periodismo lugareño de antaño

-Allá por el año 1932 se editaba en nuestra ciudad el periódico Voz del Norte, siendo entonces su director el señor David J. Pagano, periodista de pluma ágil y valiente. Fue el protagonista, involuntario si se quiere, de las que van a continuación, las cuales por el tiempo transcurrido de entonces a la fecha, tienen sabor a recuerdos imperecederos del sacrificado periodismo de antaño.
-El sábado, día señalado para la aparición semanal de “Voz del Norte”, todo es actividad tanto en la redacción como en los talleres, pues está a punto de entrar en máquina la última plana para su tiraje.
-Con su dinamismo habitual entra el director al taller y le dice a un “para letras” (aprendiz de tipógrafo), exhibiendo un papel manuscrito.
-“Componé esto, corregí vos nomás la composición, que yo tengo mucho que hacer y agrégalo a la sección viajeros”, dice Pagano.
-Así lo hizo el obrero y la edición salió normalmente a la calle. Pero el día lunes, cuando llegó el personal para comenzar sus tareas habituales halló al director hecho una furia.
-De inmediato llamó al operario que había la composición del ya citado artículo y le dio un lavado de cabeza de esos que hacen época.
-¿Qué había sucedido para que el “dire” reacccionara de tal manera?.
-El artículo estaba redactado de esta manera: “Con el propósito de tomarse unos días de descanso, partió hoy con destino a la metrópoli el señor Fulano. Deséamosle una feliz permanencia en dicho lugar.
-Bien…sucedió que el “aprendiz” había sustituído la palabra metrópoli por necrópolis.
Nota II
-También es día de salida de “Voz del Norte”. Su director se encuentra ausente. Suena el teléfono y atiende el administrador, don Mario Pagano.
-Es el dire quién llama para dar la información de un nacimiento y pide se publique la noticia. Don Mario anota los nombres y hallándose muy atareado, llama a un tipógrafo, al que entregándole un papel con los datos esenciales, le dice:
-“Tomá, redactá vos este nacimiento y componelo que yo no tengo tiempo para escribir”…
-Y el operario lo hace de esta manera. El hogar de los esposos don Fulano y doña Fulana ha sido alegrado con la llegada de un robusto bebé.
-El lunes a primera hora entró como una tromba a la redacción de “Voz del Norte” un padre ofendido pidiendo explicaciones por lo que él consideraba una broma de mal gusto que se le había gastado desde las columnas del periódico, pues el robusto recién nacido pesaba apenas dos kilos escasos.