Un niño de 7 años fue abusado sexualmente por otros dos alumnos de entre 10 y 12 años. Esto ocurrió en la escuela albergue Conrado Nalé Roxlo N°1.211 de la localidad de Gato Colorado.
Viviana Monzón, madre de la víctima, narró: “Mi hijo fue violado en la escuela por dos de sus compañeros el pasado 14 de marzo. Lo busqué por la comuna al terminar las clases, allí él se baja de la traffic que los transporta, cae y se levanta con una mirada perdida mirando a sus abusadores y viceversa”.
“Mi hijo estaba con miedo, cuando llegamos a mi casa, estaba nervioso, alterado, pateaba todo, se tiraba al suelo, lloraba pero no nos decía lo que le pasaba. Luego nos dijo ‘quiero una pistola para matar a mis compañeros’. Logramos tranquilizarlo, le dimos ibuprofeno porque tenía fiebre y se bañó”.
“Después yo me estaba bañando y él ingresó porque no resistía sus ganas de ir al baño, mientras defecaba gritaba del dolor muy fuerte. Le pregunto qué le pasa y me dijo que nada, cuando se quiere lavar en el bidet nuevamente gritaba del dolor”.
Posteriormente, prosiguió: “Al darme cuenta de la situación me imaginé lo peor. Cuando me senté a su lado me dijo ‘me caí en las espinas sentado tres días’. Se negaba a que yo lo revise, luego accedió y cuando veo su cola, estaba realmente muy lastimado. Nuevamente le pregunté qué había pasado y empezó a llorar y me dijo ‘si me prometés que no voy a ir más a esa escuela, te cuento lo que me pasó’”.
“Allí me dice ‘dos nenes jugando en el kiosco me metían el dedo por debajo del pantalón’, al decir ‘el dedo’, se refería al pene y me aseguró que los compañeros amenazaban con matarlo si le decía algo a la maestra”.
“Cuando llegan al lugar donde se cambian la ropa, los compañeros lo tiraron boca abajo, uno se le tira encima, lo toman de los brazos y me aseguró que ‘fueron 10 veces’, después lo soltó y se iban turnando entre los dos. Él gritaba pidiendo auxilio, nadie acudió y le rogaba que paren”.
Luego, la madre de la víctima afirmó: “Las nenas que se cambian en la habitación de al lado escucharon. Una compañera entró, la tiraron al suelo, la patearon, le pegaron y la manosearon. Después las nenas le dijeron a la señorita que acuda al lugar y la docente no le dio importancia, ni siquiera se levantó de su silla. Se supone que ellos están para cuidarlos”.
“La escuela siguió funcionando la semana siguiente con normalidad. La directora hizo como que nada pasó, solamente se eliminó el sector albergue, que es donde se cambian. Los padres de los otros alumnos al enterarse de esto, los sacaron de la escuela”.
“Me cansé de llamar a la directora, nunca me atendió ni se interesó por el estado de mi hijo. En el médico, él se negaba a que lo toquen o lo revisen hasta que pudimos tranquilizarlo y se dejó ver”.
“Ahora mi hijo está mal, llora todo el día, se tira al suelo, está muy triste. Quiero que se hagan cargo y las autoridades me expliquen por qué no lo cuidaron ni escucharon, le robaron la inocencia al nene, le destrozaron la vida. Los docentes tienen que ir presos, sufrió un terrible abandono”.
En las últimas horas, el Ministerio de Educación de Santa Fe tomó medidas al respecto. La directora, una docente y el celador fueron desplazados de sus cargos mientras avanza la investigación. Además, se designará un interventor para la institución.
